ESTANDARES SOBRE LOS CUIDADOS MEDICOS A LOS PACIENTES CON DIABETES MELLITUS

VISITA INICIAL

Historia Médica

Una amplia historia médica puede revelar síntomas que ayudarán a establecer el diagnóstico en un paciente si una diabetes previamente diagnosticas. Si ya se dispone de una diagnóstico de diabetes, la historia confirmará el mismo, revisará el tratamiento previo, permitirá la evaluación del grado de control glucémico en el pasado y presente, determinará la ausencia o presencia de complicaciones crónicas, ayudará a formular un plan de tratamiento y establecerá la base para unos cuidados continuos

Los elementos de la historia médica en lo que se refiere a pacientes diabéticos deben incluir los siguientes:

    Síntomas, resultados de pruebas de laboratorio y de exámenes especiales relacionados con el diagnóstico de la diabetes
  • Valores anteriores de la HbA1c
  • Características de la dieta, estatus nutricional, evolución del peso; en los adolescentes y niños, características del crecimiento y desarrollo
  • Detalles de programas de tratamiento previos, incluyendo dieta y educación para el auto-tratamiento
  • Actual tratamiento de la diabetes, incluyen medicaciones, planes dietéticos y resultados de los análisis de la glucosa en sangre y de como ha hecho uso de ellos el paciente
  • Historia de la actividad física (ejercicio)
  • Frecuencia, severidad y causas de complicaciones agudas como cetoacidosis e hipoglucemia
  • Infecciones presentes o pasadas en particular de la piel, los pies, dentales o genitourinarias
  • Síntomas y tratamiento de complicaciones crónicas asociadas a los ojos, nervios, riñones, sistema genitourinario (incluyendo problemas sexuales), vejiga urinaria y función gastrointestinal; corazón, vasculatura periférica, pies y cerebrovasculares
  • Otras medicaciones que puedan afectar los niveles de la glucosa en sangre
  • Factores de riesgo arteriosclerótico: tabaco, hipertensión, obesidad, dislipidemia e historia familiar
  • Historia y tratamiento de otras condiciones incluyendo desórdenes endrocrinos y alimentarios
  • Historia de diabetes gestacional; hiperglucemia, parto de un bebé de más de 4.4 kg., toxemia, parto de un niño muerto, polihidramnios u otras complicaciones del embarazo
  • Estilo de vida, factores culturales, psicosociales, educacionales, y económicos que puedan influir sobre el tratamiento de la diabetes
  • TUso del alcohol y del tabaco

Exámen Físico

En la primera evaluación, se debe llevar a cabo un examen físico. Las personas con diabetes corren el riesgo de desarrollar complicaciones en los ojos, riñones, pies, nervios y problemas cardíacos y vasculares. Los pacientes con diabetes de tipo 1 muestran una mayor frecuencia de enfermedades autoinmunes, especialmente desórdenes del tiroides. Todos los individuos con diabetes mal controlada tiene un mayor riesgo de infección. Los niños con diabetes mal controlada experimentan problemas de crecimiento de maduración. Por lo tanto, algunos aspectos del examen físico requieren una atención especial. Entre estos, se incluyen

    Medidas de peso y altura (y comparación con la media para la edad en niños y adolescentes)
  • Maduración sexual (durante el período peripuberal)
  • Determinación de la presión arterial (con medidas ortostáticas cuando ello esté indicado) y comparación con los valores normales para la edad
  • Exámenes oftalmoscópicos, preferentemente con dilatación de la pupila
  • Examen de la boca
  • Palpación del tiroides
  • Examen cardíaco
  • Palpación abdominal (por ej., para determinar la presencia de hepatomegalia
  • Evaluación de los pulsos (por palpación y auscultación)
  • Examen de manos y dedos
  • Examen de pies
  • Examen de la piel (incluyendo las áreas en donde el paciente se inyecta la insulina
  • Examen neurológico

El clínico debe estar también alerta por si están presentes signos de enfermedades que pueden causar una diabetes secundaria (por ej., hemocromatosis, enfermedades pancreáticas y desórdenes endocrinos como acromegalia, feocromocitoma, y síndrome de Cushing.

Evaluación de Laboratorio

La determinación de la glucosa en la sangre y de los cuerpos cetónicos en la orina debe ser posible en la consulta para un uso inmediato. Además, cada paciente deberá ser sometido a la serie de pruebas de laboratorio que son apropiados para evaluar la situación médica de cualquier sujeto en general. Además, algunas pruebas se deberán llevar a cabo para establecer el diagnóstico de la diabetes (Ver "Informe deel Comité de Expertos sobre el Diagnóstico y Clasificación de la Diabetes Mellitus" para una completa descripción sobre este tema), para determinar el grado de control glucémico y definir factores de riesgo y otras complicaciones asociadas. Estas pruebas incluyen:

  • Glucosa plasmática en ayunas (puede llevarse a cabo una determinación de glucosa al azar en un paciente no diagnosticado como prueba inicial)
  • HbA1c
  • Perfil de lípidos en ayunas: colesterol total, HDL-colesterol, triglicéridos y LDL-colesterol
  • Creatinina sérica en los adultos; en los niños, la presencia de proteinuria
  • Análisis de orina: glucosa, cetonas, proteínas, sedimento
  • Pruebas de microalbuminuria (por ej. en una muestra recogida en un tiempo conocido o razón albúmina/creatinina) en los pacientes adolescentes o postpuberales con diabetes de tipo 1 de más de 5 años y en todos los pacientes con diabetes de tipo 2. Sin embargo, algunas evidencias sugieren que la duración de la diabetes prepuberal puede ser importante para el desarrollo de complicaciones microvasculares. por lo tanto, el clínico deberá juzgar cuando estas recomendaciones se deben aplicar a los pacientes individualmente
  • Cultivos de orina si el sedimento es anormal o hay síntomas de infección
  • Determinación de la hormona estimulante el tiroides en todos los pacientes con diabetes de tipo 1
  • Electrocardiograma en los adultos

Plan de Tratamiento

Es necesario disponer de un sistema completo y organizado de registro de datos médicos cuando se inicia un tratamiento en pacientes con diabetes. Los datos deben ser accesibles cualquiera los integrantes del equipo de tratamiento y organizados de tal manera que no sólo documenten lo que ha ocurrido sino que también sirvan para recordar lo que hay que hacer a intervalos apropiados

El plan de tratamiento debe ser formulado como un pacto terapéutico individualizado entre el paciente y su familia por un lado y el médico y los miembros del equipo de tratamiento por otro lado. Debe ser resaltada la importación del auto-tratamiento. Con este fin, el plan de tratamiento debe ser preparado en colaboración con el paciente y debe implicar a este tanto como sea posible en la resolución de los problemas. Para ello se deben emplear una serie de estrategias y técnicas para facilitar una educación y unos conocimientos que permitan considerar los diferentes aspectos del tratamiento de la diabetes

Al establecer este plan de tratamiento, deben tenerse en consideración la edad del paciente, su actividad laboral o escolar, actividad física, hábitos dietéticos, situación social y personal, factores culturales y presencia de complicaciones de la diabetes o de otras condiciones médicas. La puesta en marcha de un plan de tratamiento requiere que cada aspecto del mismo sea bien comprendido y aceptado por el paciente y que los objetivos y términos del mismo sean aceptables y razonables. El plan de tratamiento debe incluir los siguiente:

  • Establecimiento de objetivos a corto y largo plazo
  • Medicaciones (insulina, hipoglucemiantes orales, glucagón, fármacos antihipertensivos e hipolipemiantes, aspirina, otros fármacos endocrinos y otras medicaciones)
  • Recomendaciones individualizadas sobre la dieta con las correspondientes instrucciones, redactadas preferentemente por un dietista experimentado
  • Recomendaciones sobre los cambios de estilo de vida apropiados (por ej., ejercicio, abstención del tabaco, moderación en el alcohol)
  • Educación del paciente y de su familia relacionada con el auto-tratamiento que sea consistente con los programas estándar de Educación del Diabético para su Autotratamiento
  • Instrucciones para la monitorización de los niveles en sangre y cetonas en orina así como llevar un registro de los resultados. La frecuencia de los análisis de sangre debe ser individualizada según las circunstancias clínicas, el tipo de tratamiento y la respuesta al mismo. Los análisis de orina deberán ser tomados como alternativa sólo si el paciente es incapaz o se niega a realizar análisis de sangre o sin el objetivo del tratamiento es evitar una hiperglucemia sintomática
  • En todos de pacientes de más de 10 años de edad que padezcan diabetes desde 3 a 5 años y para todos los pacientes de más de 30 años de edad en el momento del diagnóstico, se deberán realizar revisiones anuales de la vista y del fondo de ojo por un oftalmólogo u optómetra. Lo mismo se llevará en cualquier momento si el paciente muestra cualquier síntoma o anomalía de la visión. Sin embargo, algunas evidencias sugieren que la duración de la diabetes prepuberal puede ser importante para el desarrollo de complicaciones microvasculares y, por lo tanto, el clínico debera juzgar cuando estas recomendaciones se deben aplicar a los pacientes individualmente
  • Consultas con servicios de podiatría cuando sea necesarias
  • Consultas con servicios especializados cuando sea necesarias
  • Acuerdos sobre una ayuda y seguimiento continuos y calendario de citas próximas
  • Instrucciones acerca de como y cuando contactar el médico o a otros miembros del equipo de tratamiento cuando el paciente no es capaz de resolver por sí mismo algún problema y cuando se requiere el tratamiento de un problema agudo
  • Para las mujeres en edad de quedarse embarazadas, debe hacerse hincapié sobre métodos de contracepción u sobre la necesidad de un óptimo control de la glucosa antes de la concepción y durante el embarazo
  • Higiene dental
  • Vacuna neumocócica y contra la gripe anual

La tabla 2 resume la visita inicial