La administración conjunta de anticolinérgicos con verapamilo puede dar lugar a una potenciación de la taquicardia inducida por la atropina y otros anticolinérgicos convencionales. Asimismo, también puede haber una potenciación de la bradicardia inducida por la pirenzepina. Aunque en principio, no parece que esto pueda suponer una alteración grave, pero debe considerarse tal riesgo en pacientes con enfermedades cardiovasculares. Esta interacción tiene lugar por ser el verapamilo es capaz de activar la respuesta refleja del Sistema Nervioso Simpático. En condiciones normales, este efecto no suele manifestarse, debido a la influencia vagal sobre el nódulo sinoauricular. Sin embargo, el bloqueo o la activación vagal por atropínicos o por pirenzepina puede anular tal influencia vagal y reflejar el efecto del verapamilo sobre el ritmo cardíaco.