LA MEDICINA EN LA LITERATURA

Novela con connotaciones autobiográficas escrita en 1973 por un joven médico pediatra que presta sus servicios como interno en el pabellón 402. En dicho pabellón se alojan niños con enfermedades terminales. En la novela, se sigue el desarrollo de una leucemia en Mary, una niña de 11 años a la que se aplican tratamientos no personalizados para descubrir las mejores pautas de tratamiento y de Freddy un niño que ha sufrido varios trasplantes renales sin gran éxito. Alrededor del narrador, dos médicos diferentes: el Dr. Prader, un científico frío y calculador cuyo objetivo son los estudios clínicos capaces que determinar las mejores pautas de tratamiento con los antitumorales entonces conocidos (prednisona, vincristina, ciclofosfamida y 6-mercaptopurina) y del Dr. McMillan un médico que prefiere una medicina menos impersonal.

La labor asistencial del protagonista se vé entorpecida por el comportamiento del padre de Mary, que se opone inicialmente a cualquier tratamiento, y que más adelante, encabeza un movimiento de rebelión de los padres contra los médicos del pabellón 402.